Sonidos, vibración...no importa el modo en que lo pongamos, es un constante día a día y tan habituados estamos que no nos molestamos en mirar. Bueno, casi decir que si, ya que nuestra móvil-dependencia es tal que no seremos capaces de hacer ninguna otra tarea sin antes no revisar el dichoso aviso. WhatsApp se puede considerar una aplicación en una categoría aparte, ya sea por su popularidad o por su uso elevado a la enésima potencia. La llegada de tantos avisos derrota a cualquiera y la mayoría de los mensajes son marcados como leídos, sin llegar si quiera a echarles un ojo. Pero ha llegado el momento de recuperar esa 'ancestral' libertad que en su día tuvimos.